TANNOY
Les presento a Humberto Salomoni (el Italiano), hijo de padre italiano y madre cubana. Este personaje está presente en muchas de mis historias porque era parte del combo hi-fi, ya que tenía los mejores equipos en La Habana; por sus manos pasó lo mejor.
%202.png)
Ovidio,Humberto Salomoni, yo.
Humberto vivía en Alamar, un barrio algo ecléctico en esa época –1985– y poblado por varias culturas. Una de ellas era la chilena, que venía huyendo de la dictadura de Pinochet y se asentó ahí. En esta comunidad tuve varios amigos, muchos de ellos fuente de material discográfico; recuerdo a Mauricio, que nos regaló la primera grabación que tuvimos del álbum Seconds out, de Genesis, en un casete TDK SA que hoy se le llamaría calidad CD. Una dicha que semejante álbum llegara a mis mano con esa calidad. Sonaba espectacular.
Los otros eran los rusos (los bolos). El origen del término no es muy claro, pero parece que se trataba de un “desprecio cariñoso”. Tenía entendido que era porque se parecían a los pines de jugar bolos, que se asemejaban a las matrioskas.

Cuba estaba plagada de rusos. A diferencia de los chilenos, éstos no aportaron nada musicalmente, pero sí vendían unas latas de pimentón rojo encurtido que pa qué les cuento. ¡Rico con cojone!
Finalmente, la otra comunidad era de técnicos extranjeros, la cual era muy reducida; sólo abarcaba un lado de la cuadra y esta era muy variada: había suecos, alemanes, franceses e italianos. De ahí mi amigo el Italiano.
Su casa o más bien su cuarto, que luego adecuo acústicamente para no molestar a vecinos y familia, era lugar de largas tertulias donde escuchábamos, grabábamos y negociamos muchos equipos hifi.
Salomoni por ese tiempo tenía una combinación de amplificador y bafles Pioneer que era la locura. Siempre he amado el sonido que brinda el Pioneer, especialmente en estos dos componentes; me gusta mucho la etapa de preamplificador que usa, el desempeño en los bajos y altos es exquisito, y lo mismo sucede en los bafles.
Un día llegué a su casa y oh, sorpresa: había cambiado esos hermosos bafles Pioneer de color gris con unos drivers impresionantes y una baja frecuencia exquisita, por un par de bafles con un look muy sesentero, que parecían sacados de Mi bella genio. Quedé en shock.
NOOOOO que has hecho?, no entendía nada, pero además yo esperaba en algún momento quedarme con esos bafles y ya no estaban.
Apropósito "El Bola", un amigo que estudio conmigo electrónica, muchos años después ,me envía esta foto, el nunca supo que esos baffles yo los amaba y que siempre los quise tener.
%202.png)
Pioneer CS-F45
%202.png)
"El Bola"(my Friend)
%202.png)
Foto con comentario de Juan Carlos
Espera, escucha…y me cuentas, me relajo, miro bien los equipos y había cambiado también el amplificador por otro Pioneer, evidentemente más violento que el anterior el SA 8800-II , este venía con doble modo de ajustes de graves y agudos una locura. (Más información ver post Los Ampli).
Efectivamente sonaba increíble, respondían muy bien en bajas, medias y altas, una imagen sonora muy buena y un ángulo de difusión excelente. Pero lo que más me impresiono, fue cuando le retiro la tela protectora que traen todos los bafles, con el fin de ver que configuración tenia, por su sonido ,aseguraba que eran 3 way (tres vías), increíble, me encuentro con un solo parlante, eran los famosos Tannoy DEVON HPD 315 A "Monitor Gold", estos se producen entre el 1970 -1980. Una joya del hi-fi.


¿Como hacían para que sonaran así?; usan un driver dual Concentric, que fue creado en 1947, se dice que al comienzo no sabían qué coño hacer con él, su sonido era tan limpio y definido que mostraba lo mala que eran las grabaciones de los discos en esa época.
Driver Dual Concentric
El diseño de este parlante consiste en colocar el driver (tweeter) internamente, justo detrás del centro en el medio del bass driver.
%204.png)
%201.png)
Con un diámetro de 12 pulgadas se obtiene una distribución de la energía mayor, esto hace que tenga una propagación de 90 grados en bajas, medias, y altas frecuencias. 91 db 1 watts a 1 metro.
Trae dos controles, que se usan para ajustar detalles acústicos del sitio de escucha.

Roll-off : controlaba las altas frecuencias extremas que estuvieran por encima de 5khz.
Energy: tenía cinco posiciones para ajustar el nivel de salida del drive o tweter entre 1khz a 20kh.
Combinando estos dos controles se lograba obtener una respuesta de frecuencia lo mas plana posible. Cada bafle tenía un control de calidad riguroso, salía firmado por un inspector acústico.

Los que amamos el mundo sonoro del hi-fi, no podemos perder la oportunidad de escuchar esta joya de los años 70.